Este viernes pasado el Consejo de Gobierno ha aprobado una partida de 4.577.547 euros para el desarrollo en 2023 de la campaña de saneamiento ganadero y otros programas sanitarios en la cabaña de bovino, ovino-caprino y porcino. Estas medidas contribuyen a reducir pérdidas en las explotaciones, al tiempo que ayudan a minimizar riesgos para la salud pública, dado que sirven para reducir la incidencia de la tuberculosis y la brucelosis en humanos. También incrementan las garantías sanitarias en la comercialización de animales.
Todas las medidas aplicadas han sido orientadas para luchar contra las enfermedades que afectan a estos animales que han permitido que el Principado sea ya zona oficialmente libre de tuberculosis bovina e indemne a leucosis bovina enzoótica, perineumonía contagiosa bovina, brucelosis bovina, ovina y caprina. También han contribuido al mantenimiento del estatus sanitario de otras patologías como las encefalopatías espongiformes transmisibles y ciertas enfermedades del porcino.
En el año 2021 la Consejería de Medio Rural realizó controles en 14.680 explotaciones: 13.773 de bovino, 675 de ovino-caprino y 232 de porcino. En las ganaderías de bovino se efectuaron exámenes de tuberculosis a 365.953 reses, de brucelosis a 48.199, de vigilancia de leucosis enzoótica a 3.677 y de perineumonía a 16.181. En las de ovino y caprino se ejecutaron análisis de brucelosis a 4.928 animales. Además, en el caso del ganado porcino –jabalíes incluidos- se impulsaron programas de vigilancia serológica de peste porcina clásica y africana, así como de lucha, control y erradicación de la enfermedad de Aujeszky.
