Artículo de Patricia Oreña Presidenta de ATA

Especial Día de la Mujer

Si en 2020, año marcado por la pandemia sanitaria provocada por la Covid19, se rompieron todas las tendencias y el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) perdió autónomas, algo que no pasaba desde 2012, el pasado año 2021 cerró con un crecimiento de autónomos protagonizado por las mujeres.

El informe elaborado desde la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos-ATA con motivo del Día Internacional de la Mujer pone de manifiesto como 2021 cierra con un incremento de mujeres que duplica al de los varones: el crecimiento de las emprendedoras durante el pasado ejercicio fue del 2,8% frente al 1,1% de los varones.

En términos absolutos, de los 55.711 autónomos que sumó el RETA en 2021, 33.204 fueron mujeres y 22.507 varones. Es decir, el 59,6% del crecimiento de los nuevos autónomos fue de mujeres.

Las mujeres, protagonistas del emprendimiento en la década 2010-2021: el RETA ha sumado un total de 224.773 autónomos desde diciembre de 2010, de los que 153.822 eran autónomas frente a solo 70.951 varones, es decir, dos de cada tres, el 68,4% de los nuevos autónomos son mujeres.

El crecimiento de las mujeres autónomas en la última década fue del 14,6% frente al 3,5% que han registrado los varones.

Frente a este crecimiento registrado a nivel nacional (+14,6%, 153.822 nuevas autónomas en la década), no todas las comunidades autónomas siguen esta línea positiva.

Galicia lidera la pérdida de autónomas a nivel nacional en la última década, con un descenso del 8,2% de sus autónomas. Es más, lejos de ser el motor de emprendimiento, es la única comunidad autónoma junto con Asturias donde la pérdida entre el colectivo femenino ha sido superior a la de los hombres.

Cabe destacar que la evolución de las mujeres autónomas a lo largo de estos últimos once años ha sido diferente en las distintas comunidades autónomas: A pesar del importante crecimiento de mujeres, cinco comunidades autónomas no lograron sumar nuevas emprendedoras y cerraron el año con un descenso de autónomas: Galicia (-8,2%), Asturias (-7,1%), País Vasco (-0,9%), Cantabria (-0,4%) y Castilla y León (-0,27%).

Por el contrario, los mayores crecimientos en cuanto a número de mujeres autónomas fueron Canarias (+42,7%), Comunidad de Madrid (+30,6%), Andalucía (+30,5%) e Islas Baleares, con un aumento del 26,1%, todas ellas con un crecimiento que supera el 25% en un solo año.

Cabe destacar el comportamiento de Aragón, Castilla-La Mancha, Extremadura, Navarra y La Rioja, comunidades donde a pesar del crecimiento de autónomas, el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos registró un descenso de sus cotizantes varones.

En Asturias y Galicia, descendió tanto el número de autónomos varones como el de mujeres, siendo el descenso de éstas últimas superior al de los varones: un descenso del 7% de los autónomos varones y del 7,1% de las mujeres en el caso de Asturias y del -8,2% de las emprendedoras gallegas frente al -3,2% registrado por los varones.

Por el contrario, en Cantabria, País Vasco y Castilla y León descendieron tanto autónomos hombres como mujeres, siendo el descenso de los varones muy superior al de las mujeres.

En las comunidades donde crecieron tanto el número de hombres como el de mujeres autónomas, en todas ellas el crecimiento femenino fue porcentualmente superior al masculino.

Además, el peso de la mujer autónoma en España, a 31 de diciembre de 2021, es aún muy inferior al de los varones y representan el 36,2% del total de autónomos registrados en el RETA. Es decir, uno de cada tres autónomos en España es mujer.

Por comunidades, todas ellas siguen este mismo esquema, donde el peso de los autónomos varones es muy superior al de las mujeres. Asturias y Galicia son las comunidades donde el empleo autónomo femenino tiene mayor peso y supera la barrera del 40% del total de autónomos, concretamente el 41,1% del colectivo de trabajadores por cuenta propia en Asturias y el 40,9% en Galicia. Por encima de la media nacional se encuentran también Cantabria (38,2% de autónomas), País Vasco (38,1%), Canarias (36,9%), Comunidad Valenciana (36,7%) y la ciudad autónoma de Ceuta (36,4%).

En el otro extremo, Castilla-La Mancha es la comunidad autónoma donde menor peso tienen las mujeres con respecto al total de autónomos a pesar de sumar un 15,9% de autónomas en la última década. Concretamente en C-LM las autónomas representan el 31,8% del colectivo, frente al 68,2% de los varones.

En resumen, las mujeres somos generadoras de riqueza y empleo a buen ritmo, hasta que una presión fiscal nos impide crecer, contratar, formarnos e innovar. Hasta que el laberinto normativo en el que nos movemos nos impide avanzar, porque el cumplimiento de la maraña normativa a nivel municipal/autonómico/estatal/europeo es prácticamente imposible, caro, nos entorpece en el desarrollo de nuestra actividad y nos resta competitividad.

Y la inflación desbocada, el aumento constante de los precios de nuestros suministros…

Estamos cansadas de oír mensajes de apoyo a las mujeres, porque nos sentimos engañadas: no somos mujeres la autónomas?

Las mujeres autónomas ya hemos oído muchas palabras y hemos acudido a muchos actos. Ahora, necesitamos HECHOS. Es hora de que ustedes, los y las que nos dan lecciones de igualdad, se pongan a trabajar.